miércoles, 11 de julio de 2007

Un amigo menos

Esta semana ha sido una de las más movidas en mi poco emocionante vida. A todos los hechos que me han ocurrido, ahora se agrega a mi lista la pérdida de un amigo, al cuál por palabras propias, consideré en algún momento, le quedaba grande el nombre.

Es uno de los hombres más desafortunados que conozco, por no decir otra cosa, pero producto de sus infortunadas decisiones.

Aunque nunca existió mucha comunicación entre ambos, desde hace mucho somos amigos, incluso hubo un tiempo en que nuestras familias lo eran, ahora todo se fragmenta en pedacitos pequeños.

Siempre he tratado de darle muchos consejos, como todos los que se consideran sus amigos, siento que no han sido escuchados y no lo hago por molestar, sólo quiero que sea feliz, porque lo estimo mucho y me preocupa su bienestar.

Él se ha empeñado en equivocarse y creo que hasta le gusta sufrir, es un tipo de hombre, que considero, masoquista. Creo que le gusta tomar el camino fácil, sin pensar en las consecuencias que sus decisiones podrían llegar a provocar.

Es un tipo que, a ratos, sobrepasa el límite de la irresponsabilidad, y eso estaría bien, si fuera un chiquillo que apenas cumple los 18 años, pero ya pasó hace mucho ese límite de edad, y ahora no sólo carga con él, sino que además debe ocuparse de una personita que aún no tiene el juicio completamente formado.

Las relaciones se forman con bases, y en estas, la más importante es la confianza. Y por creerle a todos los demás, y no a una amiga que lo ha apoyado desde hace muchos años, meditando bien el asunto, creo que esta relación de amistad está oficialmente… muerta.

1 comentarios:

Ibagian dijo...

Que mal... siempre es doloroso perder un amigo